Hay momentos en que te das cuenta que no has ahorrado lo suficiente y te arrepientes de haber gastado más de la cuenta. Sí, suele pasar, pero no te preocupes: le pasa a todo el mundo (o a casi todo el mundo). A veces no somos conscientes y gastamos más de la cuenta. Es por eso que desde aquí intentaremos ofrecer algunas soluciones para que podáis ahorrar.
Vamos allá…
- Cada mes que empieza, márcate un poco el presupuesto que tienes. Los japoneses tienen un sistema que va muy bien y se llama KAKURO. Venden en muchos lugares libretas basadas en el kakuro oriental que nos puedo ayudar a organizarnos mejor. Simplemente se trata de contar los gastos fijos que tienes cada mes (como por ejemplo el alquiler, la hipoteca, el colegio de los hijos, etc.)
- No compres impulsivamente: ya sea online o bien presencial, es un poco difícil detenerse cuando estamos viendo algo que nos gusta. Esto debemos zanjarlo, porque aunque no nos demos cuenta, nos hace gastar mucho. Evita la frase “ir de compras”. Comprar cosas está bien pero siempre tiene que ser de forma mesurada. Pero aquí tendríamos que añadir la frase de “ni tanto ni tan poco”, ya que tampoco es plan de que nunca os compréis nada, sobre todo teniendo en cuenta como estas pequeñas cosas afectan nuestra felicidad. Comprar algo de vez en cuando no solo está bien sino que es absolutamente necesario para tener autoestima y para poder salir un poco de la rutina y estrenar algo nuevo (sea un vestido, una película o unos rotuladores, da igual lo que sea, lo importante es comprar algo, un detalle).
- Busca ofertas y cupones de descuento: leyéndolo así puede resultar un poco cutre, pero nada más alejado de la realidad. La mayoría de supermercados ofrecen buenas promociones y descuentos, mira la forma de poder acceder a ellos tantas veces como haga falta. También puede ser interesante que pruebes la compra online, ya que así te obligas a comprar lo que realmente te haga falta y evitas las compras impulsivas. La compra online tiene la ventaja de que tiene algunos productos en promoción y muy baratos, lo único que para que te lo traigan a casa debes pagar una cantidad de dinero, pero queda compensado si decides que sea por ejemplo una compra mensual y así si gastas una cantidad de dinero considerable ya te sale gratis. Es más, evitas hacer visitas al supermercado a menudo, que solo son una tentación!
- Reduce gastos en casa: ¿eres de los que se dejan la luz abierta de la cocina cuando están en el comedor? ¿o de los que dejan que el agua de la ducha caiga constantemente sin pensar en cuanto rato llevas ya debajo? todas estas pequeñas cosas suman y ya es hora de que aprendas a reducirlas. ya verás como a final de mes lo notas y lo nota tu bolsillo. Al fin y al cabo aprender a ahorrar no tiene secretos, es simplemente una cuestión de práctica y de costumbres, al final sale solo y en pocos meses verás que tendrás más dinero paraa poder salir más y comprarte más cositas